MONICION PARA EL V DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO CICLO C
La vocación: Tener la mirada fija en el Señor
M.R. Pág. 233 / Lecc I Pág. 276
MONICIÓN DE ENTRADA
Nos reunimos hoy porque queremos celebrar al Señor y responder a la misión que nos encomienda. Estamos llamados a dar testimonio del amor de Dios en nuestra vida. Iniciamos esta celebración de pie.
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(Saludo) Venimos a vivir nuestro encuentro con Dios. Todos nosotros estamos invitados a ser testigos del Evangelio. llenos de alegría y agradecidos con el Padre, demos inicio a esta celebración eucarística
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(Saludo) Nos reunimos a profesar nuestra fe, respondiendo al llamado que el Señor nos hace. Todos nosotros estamos invitados a ser testigos del Evangelio. con gozo iniciemos esta santa misa
LITURGIA DE LA PALABRA
Primera lectura Is 6, 1-8
Salmo Sal 137, 1-5.7-4
Segunda lectura 1Cor 15, 3-8.11
Evangelio Lc 5, 1-11
MONICION A LAS LECTURAS (Global)
Hoy la liturgia nos recuerda que como bautizados El Señor nos llama a ser instrumentos de paz, justicia y amor en el mundo. Respondamos con prontitud a este llamado del Señor.
o
El Señor nos llama a ser instrumento de paz, justicia y amor en el mundo. Respondamos con prontitud a este llamado del Señor y seamos pescadores de hombres con nuestro testimonio
MONICION A LAS LECTURAS (Individual)
Primera Lectura:
El joven Isaías, fue tocado por Dios, y acepto la tarea que se le encomendo. Asi tambien el conocimiento y la presencia de Dios nos transforma y responsabiliza a trabajar con El.
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La llamada de Isaías ocurre en el Templo de Jerusalén durante una liturgia solemne que celebra la trascendencia divina. Dios lo limpia de sus impurezas y lo convierte en hombre capaz de anunciarlo entre sus hermanos
Segunda Lectura:
Pablo nos explica cuál ha sido el contenido de su predicación y nos recuerda que la fe es fundamental para experimentar la presencia de Cristo en nuestra vida.
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A la luz de las escrituras, San Pablo cita lo que podríamos llamar el primer «credo cristiano». Lo que él intenta demostrar es que su obra evangelizadora y su testimonio concuerdan del todo con la tradición apostólica.
Evangelio:
Pedro descubre su pequeñez ante la grandeza de Jesús.El Señor llama a Pedro y a sus amigos para hacerlos pescadores de hombres. Y aun reconociendo ser pecadores no erraron en la dirección de su camino.
o
Jesús inicia su ministerio público en las orillas del lago de Genesaret y llama a sus primeros discípulos. Ellos se convertirán en pescadores de hombres.
PRESENTACIÓN DE LAS OFRENDAS
Llevemos a la Mesa del Señor estos dones de pan y vino, y junto con ellos ofrezcamos nuestro compromiso de fidelidad a Dios.
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El pan y el Vino que presentamos, son fruto de nuestras diarias fatigas y trabajos. Ellos se convertiran en sacramento de vida eterna que repare nuestras fuerzas para ser fieles seguidores de Jesús.
COMUNIÓN
Sólo quien recibe la Eucaristía tiene la gracia divina que cambia el corazón y lo capacita para comunicar el amor de Dios a los hermanos
Nos acercamos a comulgar
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Al acercarnos a la mesa eucarística, reconozca a Cristo como a alguien que está de verdad vivo y presente entre nosotros… El quiere purificarnos de todos nuestros pecados y defectos con su gracia salvadora
o
Al comulgar, reconocemos que Cristo está de verdad vivo y presente entre nosotros… Él nos purifica de todos nuestros pecados con su gracia salvadora. Acerquémonos a recibirlo.
DESPEDIDA
Dios nos invita a ser valientes y generosos al respondes a su llamada. Aceptemos la buena nueva que el Señor nos ofrece y demos testimonio ante el mundo con una vida coherente
ORACION DE LOS FIELES / ORACION UNIVERSAL
Oremos al Padre del Unigénito, al Hijo del Dios eterno y al Espíritu, fuente de todo bien:
1.- Para la Iglesia inmaculada del Dios verdadero, extendida por todo el mundo, pidamos la plena riqueza del amor de Dios. Roguemos al Señor
2.- Para los que gobiernan los pueblos y tienen en su mano el destino de los hombres, pidamos el espíritu de justicia y el deseo de los hombres, pidamos el espíritu de justicia y el deseo de servir con dedicación a sus conciudadanos. Roguemos al Señor
3.- Para los débiles que se ven oprimidos y para los justos que sufren persecución, pidamos el espíritu de fortaleza, que los haga perseverar en la fidelidad al Señor. Roguemos al Señor
4.- Para nosotros mismos, pidamos al Señor un temor filial, un amor ferviente, una vida feliz y una santa muerte. Roguemos al Señor
Dios nuestro, que has confiado a nuestros labios impuros y a nuestras fuerzas débiles la misión de proclamar el Evangelio, susténtanos con tu Espíritu, para que tu palabra sea aceptada por los hombres con corazón generoso y dé fruto abundante en todo el mundo. Por Jesucristo, nuestro Señor.
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