14 noviembre 2018

XXXIII Domingo del Tiempo Ordinario 18 de noviembre de 2018 Misa Familiar

(Misa con niños, catequistas y padres) 
Prepara: Javier Leoz


Objetivo: sensibilizarnos sobre una realidad: cada día que pasa es una oportunidad para el bien o para el mal, para vivir cerca de Dios o alejarnos de Él.

*Idea: Jesucristo ilumina el fin de la humanidad. Nos infunde esperanza y paz.


1. MONICIÓN DE ENTRADA


Buenos días a todos. Durante todo el año, los cristianos, nos vamos reuniendo alrededor del altar y escuchamos la Palabra del Señor que nos anima a estar y ser vigilantes hasta el día en el que El vuelva. ¿Lo sentimos así? ¿Esperamos al Señor? ¿Nos damos cuenta que, el día en el que más distraídos nos encontremos, el Señor vendrá?


¿Qué tenemos que hacer mientras tanto? Vivir nuestra vida, pero con fe y con esperanza. Sin olvidar que, el cielo, es nuestra casa definitiva. ¡Cuántas personas han olvidado esto y, por eso mismo, viven sin ilusiones, sin más ganas que “el ir tirando”!



Demos gracias a Dios porque, Cristo, nos da valor y ánimo para seguir adelante haciendo todo el bien que podemos.


Nos ponemos de pie.


2. PENITENCIAL


2.1. Es fácil amar a Dios pero, las prisas, nos hacen olvidarlo frecuentemente. ¿Cómo va nuestra oración personal? Señor, ten piedad


2.2. Es fácil vivir como si Dios no existiera pero, luego, nos sentimos vacíos, tristes. ¿Vivimos con intensidad la Eucaristía? Cristo, ten piedad


2.3. Es fácil dejarnos engañar por los escaparates que ofrece la sociedad del consumo. ¿Estamos contentos de que Dios nos haya hecho sus hijos? Señor, ten piedad


3. MONICIÓN A LAS LECTURAS


Poco a poco nos acercamos al tiempo de Adviento que nos llevará a la Navidad. Por eso mismo, las lecturas que escuchamos en este penúltimo domingo del Año Litúrgico, nos hablan del fin de los tiempos, de la venida de Cristo. Hoy, las lecturas, nos invitan a la vigilancia. No nos podemos dormir. El Señor vendrá, el mundo desaparecerá y viviremos aquellos que, de verdad, creamos y esperemos en Dios. Escuchemos atentamente.


4. ORACIÓN DE LOS FIELES


4.1. La Iglesia, en medio del mundo, anuncia el mensaje de Jesús. Para que ninguna dificultad le impida ser mensajera y portavoz de su Palabra. Roguemos al Señor.


4.2. Por nuestra Diócesis. Por nuestro Obispo (XX) Para que en este día seamos solidarios y espléndidos en sus necesidades. Hoy celebramos el día de la Diócesis. Roguemos al Señor.


4.3. Por todos los que ya no piensan en Dios. Por aquellos que lo han olvidado. Para que descubran que, un mundo sin fe, es un mundo sin alegría. Roguemos al Señor.


4.4. Por los que destruyen el mundo. Por las guerras. Por los países que dedican muchos medios a las bombas atómicas o instrumentos de guerras. Para que trabajen más por el desarrollo de los pueblos más pobres. Roguemos al Señor.


4.5. Por todos nosotros. Para que estemos vigilantes. Para que hagamos el bien y nos alejemos del mal. Roguemos al Señor.


5. OFRENDAS


5.1 Con este panel de los acontecimientos tristes que ocurren en el mundo, queremos reflejar la otra cara de la moneda que existe en nuestra tierra: guerras, suicidios, hambre, miseria, bombas, secuestros. Que el Señor nos ayude a trabajar por una tierra más habitable (recortar de la prensa de la semana sucesos trágicos y actuales que se dan en nuestro mundo, sociedad, provincia, ciudad, pueblo….)


5.2 Con este retrato de JESUCRISTO, queremos hacer profesión de nuestra fe: CON ÉL, TODO. SIN ÉL, NADA. Cristo es la salvación de la humanidad.


5.3. El pan y el vino, ofrendas auténticas y verdaderas, llevamos hasta el altar para que, el Señor, se haga presente en ellas y las convierta en su Cuerpo y su Sangre. Lo necesitamos para ser fuertes y estar vigilantes.


6. ORACIÓN




NADA  SIN TI, SEÑOR


El final, sin Ti, Señor


no será tan feliz


El mañana, sin Ti, Señor


no será como el mundo nos  ofrece




NADA  SIN TI, SEÑOR


La guerra, sin Ti, no se  apagará


El odio, sin Ti, no  desaparecerá


La esperanza, sin Ti, no  será posible




NADA  SIN TI, SEÑOR


La eternidad, sin Ti, no la  alcanzaremos


El cielo, sin Ti, no es  posible vivir




NADA  SIN TI, SEÑOR


Ayúdanos a pensar en Ti


A creer en Ti


A esperar en Ti


A soñar en Ti


NADA  SIN TI, SEÑOR


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