XXIII DEL T. ORDINARIO
Ciclo C, domingo 4 de septiembre de 2022
CANTO DE ENTRADA: “Cerca del hogar”
MONICIÓN DE ENTRADA:
Amigos sed bienvenidos a esta eucaristía. Un domingo más, el Señor presente en esta Eucaristía, nos da fuerzas, nos va indicando el camino a seguir para ser sus amigos; para ser sus discípulos, y nos ayuda a desprendernos de todo lo que nos separa de ÉL.
En la vida, como en todo, es más fácil marchar por los caminos fáciles que por aquellos que exigen riesgos, disciplina o simplemente dejar algo de nosotros por los demás.
ACTO PENITENCIAL:
–Por las veces en que valoramos más lo material que lo espiritual. Señor ten piedad
–Por las veces en las que vence más lo aparente que lo que no vemos. Cristo ten piedad
–Por las veces en que hacemos de la cruz un adorno y no una bandera del amor que Dios nos tiene en Jesús. Señor ten piedad.
GLORIA
LITURGIA DE LA PALABRA
ORACIÓN COLECTA:
Tú, Señor, quieres que vivamos unidos a ti para que podamos disfrutar de la salvación que nos has ofrecido en tu Hijo, para que podamos ser seguidores tuyos y contar a todos la felicidad de creer en ti.
LECTURA: Filemón 9b-10.12-17
CANTO: “ESCUCHA TÚ LA PALABRA DE DIOS”
EVANGELIO: Evangelio según San Lucas 14,25-33
HOMILÍA:
Frase para comentar: “POR EL SEÑOR LO QUE HAGA FALTA”
Imagen para comentar:
ORACIÓN DE LOS FIELES:
— Por la Iglesia que somos todos nosotros, para que produzcamos frutos de justicia y caridad, conforme al Evangelio. ROGUEMOS AL SEÑOR.
— Por todas las personas que nos ayudan con sus palabras y con su vida a conocer a Jesús ya ser más cristianos. ROGUEMOS AL SEÑOR.
— Para que nosotros los jóvenes no nos sintamos al margen, sino que podamos contar con una comunidad que nos apoya, nos anima y se fía de nosotros. ROGUEMOS AL SEÑOR.
— Finalmente pidamos por los que viven una fe a su manera; sin atender las necesidades de los pobres; sin escuchar la Palabra de Dios. Para que el Señor les haga ver la belleza de su presencia. ROGUEMOS AL SEÑOR.
LITURGIA EUCARÍTICA
OFERTORIO:
— Con este semáforo queremos representar las indicaciones que Jesús nos da para ser sus testigos. Que lejos de pasar de largo nos fijemos en todo aquello que nos lleva al encuentro con El.
— Con esta cruz de madera queremos representar el amor que Dios nos tiene. Y, además, nuestro compromiso de seguirle aún en medio de dificultades.
— Finalmente, con el pan y el vino, traemos hasta el altar la gratitud de todos nosotros por los muchos beneficios y regalos que Dios nos da. Que se haga presente en el altar y podamos comulgar el pan único y partido.
CANTO: ¿QUÉ TE PUEDO DAR?
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS:
Recibe estas ofrendas como muestra de que queremos hacer siempre lo que a ti te gusta. Y haz que cuando los recibamos trasnformados en tu Cuerpo y Sangre sean para nosotros la fuerza que necesitamos para ser testigos de tu misericordia y podamos vivir sincera y coherentemente.
PLEGARIA EUCARÍSTICA
PREFACIO:
Te damos gracias Señor por tu Hijo Jesús, porque Él nos ha abierto las puertas de tu Reino para que todos podamos entrar; porque en Él nos has hecho hijos tuyos. Él cumplió tu voluntad hasta las últimas consecuencias y con ello nos dio la posibilidad de ser aunténticas personas siguiendo su ejemplo. Ayúdanos, Señor, a trabajar por construir tu Reino, liberándonos de las cosas que nos sobran para quedarnos con lo realmente importante, el ser personas en plenitud como tu Hijo Jesús. Por eso con los que están contigo en el cielo te cantamos.
SANTO: “HOY QUIERO PROCLAMARTE”
PADRENUESTRO (cantado en el altar)
CANTO DE LA PAZ: “LA PAZ TE DOY A TI MI HERMANO”
CANTO: (este canto es para antes de la comunión, en el momento de la invitación a participar del banquete eucarístico)
«El Señor Dios nos amó
Como a nadie amó jamás
Él nos guía como estrellas
Cuando no exístela luz,
Él nos da todo su amor
Mientras la fracción del pan,
Es el pan de la amistad,
El pan de Dios.
Es mi cuerpo
Tomad y comed
Esta es mi sangre
Tomad y bebed,
pues yo soy la vida
yo soy el amor.
¡Oh Señor, condúcenos
Hasta tu amor!»
CANTO DE COMUNIÓN: “ALMA MISIONERA”
ORACIÓN FINAL:
Te seguiremos Señor,
dejando lo que sea necesario,
sin atarnos a los bienes,
ni a los afectos,
ni a nuestros propios proyectos.
Lo dejaremos todo Señor
para que ocupes el centro,
y el horizonte,
y empapes nuestra sed de encuentro.
Abre Señor tus brazos
y estréchanos fuerte,
sostennos en las dificultades
y anima nuestro espíritu
en los conflictos.
Sí, queremos seguirte
ser discípulos,
eco de tus palabras
reflejos de tu mirada,
testigos de tu presencia.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN:
Te damos gracias por el alimento que nos has dado, haz que fortalecidos con él podamos entragarnos más libremente a los demás.
CANTO FINAL: “ROMPE A GOLPES”
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