27 mayo 2016

Dadles vosotros de comer

Tú, Señor Jesús,
el día de Jueves Santo,
víspera de tu pasión,
en un contexto Pascual
decidiste quedarte para siempre
entre nosotros,
te hiciste pan, comida
para alimentarnos,
para que nosotros nos convirtiésemos en buen pan
y ser así comida para el mundo.

Tú, Señor Jesús,
quisiste que nos reuniéramos
fraternalmente
tus seguidores en torno a una mesa
para recordar y celebrar lo que Tú
hiciste en aquella Última Cena.
Así juntos actualizar tus Palabras:
Tomad y comed, esto es mi cuerpo… 

¡Qué misterio más grande!
¡Qué cosas que haces. Jesús!

Tú te nos das a diário como alimento.
Todos comemos un mismo pan.
Tú vienes a cada uno de nosotros.
Gracias, Señor Jesús por este don
tan inmenso de la Eucaristía. Gracias.

Unidos a Ti para estar todos unidos.
Y aquel día en Galilea cuando
los Apóstoles se te acercan,
mostrándote una urgente necesidad
que veían les dices:
“dadles vosotros de comer”.

Tú quieres, a sí me parece,
que nos impliquemos directamente
para solucionar las necesidades
que descubrimos en nuestro mundo.

Hoy también hay personas que tienen hambre,
mucha hambre aquí,
y no digamos en los países
del Tercer mundo.
Son muchas las personas que necesitan
trabajo para poder vivir, sentirse útiles,
realizarse, poder criar una familia dignamente.
Es urgente la solución de este problema.
Impresiona a veces, por la noche,
observar a personas que se acercan
a los contenedores de basura
para recoger lo que otros han tirado
y vivir de los deshechos,
de la basura.

Señor Jesús,
unos mucho y otros bien poco y todos hijos de Dios,
todos seres humanos
salidos de tus manos.

Señor yo te pido hoy
para que quienes están al frente
de las organizaciones de los países
y del mundo…
para que cuantos tienen poder,
el que sea,
que se lo tomen en serio y que miren
a tanta gente necesitada que se lo pasa muy mal,
y que busquen por todos los medios la solución,
y que al menos si de momento no la hay
que hagan suya para ofrecer a todos
el lema del compartir.
Con ello mucho se solucionaría.

Señor Jesús que la Eucaristía
y la caridad vayan unidas de la mano
en todas las comunidades cristianas.
Señor Jesús, que mirándote a Ti,
contemplándote, te sepamos descubrir
tu perenne acción de gracias a Dios
Padre y tu compromiso firme
por los necesitados.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Deja tu comentario