17 noviembre 2022

Evangelio para niños XXXIV Domingo del tiempo ordinario: 20 noviembre

 Evangelio para niños XXXIV 

Domingo del tiempo ordinario

El buen ladrón - Lucas 23, 35-43


En aquel tiempo, las autoridades y el pueblo hacían muecas a Jesús, diciendo: - A otros ha salvado; que se salve a sí mismo si él es el Mesías de Dios, el elegido. Se burlaban de él también los soldados, ofreciéndole vinagre y diciendo: - Si eres tú el rey de los judíos, sálvate a ti mismo. Había encima un letrero es escritura griega, latina y hebrea: "Este es el rey de los judíos". Uno de los malechores crucificados lo insultaba diciendo: - ¿No eres tú el Mesías? Sálvate a ti mismo y a nosotros. Pero el otro lo increpaba: - ¿Ni siquiera temes tú a Dios estando en el mismo suplicio? Y lo nuestro es justo, porque recibimos el pago de lo que hicimos; en cambio, éste no ha faltado en nada. Y decía: - Jesús, acuérdate de mí cuando llegues a tu reino. Jesús le respondió: - Te lo aseguro: hoy estarás conmigo en el paraíso.

Explicación

Los tiempos o momentos difíciles que Jesús anunció a sus amigos, también los vivió él, cuando le persiguieron las autoridades, le traicionaron los amigos, le dejaron solo, y le maltrataron hasta matarle en la cruz, condenado como si fuera un malhechor. Cuando estaba crucificado, algunos le decían con burla: ¡Si tú eres el Rey de los judíos, sálvate a ti mismo ! Uno de los crucificados con él, sin embargo le dijo: Jesús, acuérdate de mí cuando llegues a tu Reino. Y Jesús le respondió: Hoy estarás conmigo en el paraíso. Te lo aseguro.


Por él quiso reconciliar consigo todos los seres

Dibujo realizado por: Fr. Félix Hernández Mariano descargar la imagen )

Evangelio dialogado

Te ofrecemos una versión del Evangelio del domingo en forma de diálogo, que puede utilizarse para una lectura dramatizada.

34 DOMINGO - CRISTO REY DEL UNIVERSO - "C"

Narrador: Hoy es la fiesta de Cristo Rey del Universo. Es la historia de un rey que murió crucificado. Un rey que no se parece en nada a los reyes de aquí abajo. Habla de un rey crucificado y de un reino muy distinto a los reinos de este mundo. Recordemos el momento:

+ Cuando crucificaron a Jesús, las autoridades y el pueblo se burlaban de él, diciendo:

Niño1: A otros ha salvado, que se salve a sí mismo si de verdad es el Mesías de Dios.

Niño 2: Eso es, que se salve a sí mismo si es el Mesías de Dios, el Elegido.

Narrador: Se burlaban también de él los soldados, ofreciéndole vinagre y diciendo:

Niños: Si eres tú el rey de los judíos, sálvate a ti mismo.

Narrador: Había encima de la Cruz un letrero en escritura griega, latina y hebrea: “ESTE ES EL REY DE LOS JUDÍOS”.
Uno de los malhechores crucificados le insultaba diciendo:

Malhechor1º: ¿No eres tú el Mesías? Sálvate a ti mismo y a nosotros.

Narrador: Pero el otro malhechor le regañaba.

Malhechor2º: ¿Ni siquiera tú, estando en el mismo suplicio, tienes temor de Dios?

Malhechor1º: Si es Dios... ¿por qué le han condenado como a nosotros?

Malhechor2º: Nuestra condena es justa, recibimos el pago de lo malo que hicimos, pero éste no ha hecho nada malo.

Narrador : Y dirigiéndose a Jesús le dice:

Malhechor2º: Jesús, acuérdate de mí cuando llegues a tu Reino.

Jesús: Te lo aseguro: hoy estarás conmigo en el paraíso.

Elaborado por: Fr. Emilio Díez Ordóñez y Fr. Javier Espinosa Fernández

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Deja tu comentario