HORARIO MISAS VERANO 2024

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INSCRIPCIONES CATEQUESIS CONFIRMACIÓN Y POSCOMUNIÓN 2024-2025

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09 septiembre 2024

Domingo, 15 de septiembre de 2024: reflexiones

 LECTURA DEL LIBRO DE ISAÍAS 50,5-9A:

“Se describe al Siervo Sufriente como un hombre fiel a Dios, perseguido y atacado. Él sabe que el Señor lo asiste y por tanto nadie podrá acusarlo”. La actitud ante los problemas de una persona que tiene en su corazón a Dios es diferente a una persona alejada de Dios. La que tiene a Dios sabe que el Señor nunca lo defraudará, por ello confía en él, le ofrece sus dolores, sufrimientos, críticas, ultrajes, golpes, con la certeza que el Señor lo ayuda y asiste, que pelea por él y que le da una gracia especial para salir adelante a pesar de todo. En cambio, el alejado, el que no confía en el Señor, la actitud ante los problemas es de desespero, reniega de Dios, de la vida, de los demás, perdiendo la oportunidad de Santificarse. Que el Señor nos de la gracia de convertirnos, para entender que el Señor me ayuda en cualquier circunstancia de la vida, por difícil que sea. Así habrá paz en mi corazón, aún en medio de los problemas.


SALMO 114, 1-2. 3-4. 5-6. 8-9:

“Caminaré en presencia del Señor en el país de la vida”: El amar a Dios, da como resultado confiar e invocarlo siempre, consagrar la vida a él, creer en su misericordia, en su justicia y lealtad. Es sentir que él camina conmigo, que seca mis lágrimas y que me da una gracia especial para superar las dificultades y sobre todo, que no me deja caer en desgracia y me mantiene firme en la fe, la esperanza y la caridad.


DE LA CARTA DEL APÓSTOL SANTIAGO 2,14-18:

“La sola fe no es suficiente, es necesario expresarla con obras, sirviendo a los hermanos que pasan necesidad”. Así como la fe y la razón no se contraponen, sino que se complementan, así mismo es la fe y las obras. Han de ser complemento la una de la otra. Las obras no pueden ser sólo por filantropía, sino como resultado de un encuentro vivo con Jesús que ama a los pobres y que nos invita a ser luz en medio de los que caminan en tinieblas. Las obras de caridad realizadas con amor por el necesitado permiten exteriorizar ese compromiso con el Evangelio. El Apóstol Santiago, viendo la necesidad de la comunidad, no dudo de predicarles a los cristianos la importancia de que la fe esté acompañada de obras, por ello les dice que la fe, si no tiene obras, por sí sola está muerta. Que el Señor nos ayude a dar testimonio en la integridad de la fe y de las obras, de manera especial en las comunidades más pobres y desamparadas de nuestras parroquias.

EVANGELIO SEGÚN SAN MARCOS 8,27-35: “La confesión de Pedro: ¡tú eres el Cristo!”

Ante una comunidad exigente, donde pide hoy más testimonio, hechos y obras, más que palabras, estamos llamados no sola mente a ser; sino también parecer ser; para que nuestra evangelización llegue a todos y de manera especial a los más alejados de nuestras parroquias. De esta manera, estaremos cumpliendo con nuestra misión de llegar a todos con el anuncio del Evangelio, para que todos confiesen que Cristo es el Señor, el Mesías y Salvador, sin rodeos ni ambigüedades, como la respuesta de Pedro a Jesús, cuando les pregunta a los discípulos: “Y vosotros, ¿quién decís que soy?”. Pedro no dudo en decir: “Tú eres el Mesías”. Se debe tener en cuenta, que en el proceso de anuncio del Evangelio, de cara a Jesús nos vamos perfeccionando de nuestros errores y el mismo Jesús, por amor y misericordia nos va corrigiendo. Así lo vemos en el caso del Apóstol Pedro cuando Jesús empezó a instruirlos sobre su Pasión, muerte y Resurrección, donde Pedro se lleva a Jesús a parte y lo Increpó, indicándole que él no lo permitiría. Jesús no dudo en corregirle fuertemente cuando le dice: “¡Quítate de mí vista, Satanás! ¡Tú piensas como los hombres, no como Dios!”. Que el Señor nos regale la humildad para permitir nuestra corrección, para ser capaz de negarnos a nosotros mismo, de tomar la cruz y seguir al Señor y para entender las palabras de Jesús: “Mirad, el que quiera salvar su vida la perderá; pero el que pierda su vida por mí y por el Evangelio la salvará”.

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