24 agosto 2022

Domingo XXII del Tiempo Ordinario 28 agosto de 2022: Moniciones y peticiones

 Monición de entrada

Hermanos, sean bienvenidos a la fiesta del Señor, en la que tenemos un lugar especial reservado para cada uno de nosotros. En el vigésimo segundo domingo del tiempo ordinario, el Señor nos instruirá con su palabra para que actuemos siempre con humildad y sencillez, trabajando desinteresadamente por los demás. Participemos con fe.

 Monición a la Palabra

Las lecturas de este domingo ponen ante nuestros ojos el tema de la humildad. El Señor prepara casa y mesa a quienes el mundo se las niega. Y el evangelista insiste: además de sentar a su mesa a los humildes. Con un corazón humilde y sencillo escuchemos atentamente esta Palabra.

 Oración de los Fieles

PRESIDENTE: Elevemos queridos hermanos, las oraciones que brotan desde nuestra existencia para que Dios las escuche, con fe viva digamos: Dios de amor escúchanos.

 1. Por nuestra Santa Madre, la Iglesia Católica, para que con el impulso del Espíritu Santo siga las instrucciones del Papa Francisco, prestando un servicio con humildad desinteresada en el mundo.

 2. Por los que gobiernan las naciones, para que sirvan desinteresadamente y sin enriquecimientos ilícitos, buscando siempre el progreso y desarrollo de los pueblos.

 3. Por los más necesitados, para que, por la generosidad de quienes han sido bendecidos abundantemente por Dios con bienes materiales, reciban con prontitud y sin interés el auxilio que con ansias buscan.

 4. Por los que este día hemos compartido el banquete del amor, para que la palabra que hemos escuchado haga germinar en nosotros semillas de humildad y sencillez.

 PRESIDENTE: Señor, nuestras súplicas te las dirigimos con un espíritu humilde y confiado, escucha también las que quedan en nuestro interior. Por Cristo Nuestro Señor. Amén.

 Presentación de las Ofrendas

Con las ofrendas de pan y vino, ofrezcamos al Señor nuestro corazón humilde, sencillo y desinteresado.

 Comunión

Cristo se nos ofrece constantemente como alimento que da vida eterna. Hoy podemos recibirle acercándonos a la Santa Comunión. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Deja tu comentario