Si buscamos un hilo conductor que una las temáticas de las tres lecturas de este domingo, sería el siguiente: la vocación cristiana implica necesariamente la conciencia clara de una misión. El proyecto de Dios (un plan de Amor) es la base de esta vocación y de la misión. Siguiendo el contenido de las tres lecturas, podríamos resumir así: el Plan de Dios está contenido en la Ley (primera lectura) y Cristo representa la realización plena y definitiva de este plan (segunda lectura); Cumplir y obedecer la Ley (el plan de Amor) se expresa y se manifiesta en el encuentro con el prójimo (evangelio): haz tú lo mismo. Tal vez deberíamos cambiar el orden, y comenzar primero por la experiencia humana, para concluir que antes de la Ley hay un hombre, Jesús, que es imagen de Dios invisible, primogénito de toda creatura, y que es el centro que da cohesión, sentido y unidad a todo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Deja tu comentario