20 agosto 2019

CELEBRACIÓN DE ENVÍO A LOS CATEQUISTAS EN EL INICIO DE LA CATEQUESIS

ENVÍO DE LOS CATEQUISTA

Archivo para descargar: ENVÍO DE LOS CATEQUISTA FINAL
Algunas sugerencias para realizar en nuestras comunidades.
MONICIÓN DE ENTRADA:
Todos los domingos en torno al altar nos reunimos para celebrar el misterio de la muerte y resurrección del Señor. Este domingo queremos que nuestra comunidad reflexione sobre una actividad muy importante y fundamental que tiene nuestra comunidad. LA CATEQUESIS.
La catequesis se entronca con la misión de Jesús de Nazaret: anunciar la Buena Noticia y que transmitió después a sus discípulos: “Id por todo el mundo y proclamad la Buena Noticia a toda criatura. El que crea y se bautice, se salvará, pero el que no crea, se condenará”.
Durante este curso que inicie muchos niños y adolescentes van a ser ayudados a profundizar en la fe que recibieron en el bautismo. Los catequistas desempeñan esta tarea, propia de la Iglesia y en nombre de nuestra comunidad.
Hoy, solemnemente y en esta celebración, vamos a nombrar, acoger y enviar, a todos, en nombre de Dios y de su Iglesia.
CANTO DE ENTRADA: (Iglesia peregrina)
SALUDO DEL CELEBRANTE:
Que el amor del Padre Dios, manifestado en su Hijo Jesús, quien nos anunció su Buena Noticia y actuó con las fuerzas del Esp. Santo, esté con todos nosotros.
ACTO PENITENCIAL
+ Tú, el enviado por el Padre para enseñarnos que también es nuestro, Señor, ten piedad.
+ Tú, que enviaste a los tuyos a anunciar la Buena Noticia de la Salvación, por todas partes. Cristo, ten piedad.
Tú, que eres el único Maestro y Salvador.
Señor, ten piedad.
ORACIÓN:
Oh, Dios, que enviaste al mundo a tu Hijo como luz verdadera, derrama tu Espíritu sobre estos catequistas de nuestra parroquia, para que siembren la semilla de la verdad y, encendidos con su fuerza, se entreguen de tal modo a su tarea evangelizadora que vayan cada día construyendo y proclamando tu Reino. Por N.S.J.
LITURGIA DE LA PALABRA: (Se proponen estas, o pueden elegir otras)
PRIMERA LECTURA: Is. 5, 1-8
Monición: 
Isaías nos narra su vocación y nos hace reflexionar sobre la vocación de todos aquellos que son llamados a ser profetas, mensajeros de Dios en medio de la comunidad. Si todo cristiano es un profeta, mucho más lo será el catequista, pues, a él, se le encomienda de modo especial mostrar el sentido profundo que la fe descubre en la historia y en los acontecimientos.
SALMO
SEGUNDA LECTURA: I Tes. 1, 5-10
Monición: 
San Pablo explica a los cristianos de Tesalonónica el valor del testimonio de fe tanto personal como comunitario. La fe de esta comunidad ha saltado las barreras locales y su fama se ha extendido por todas partes. Pablo es un evangelizador y conoce el valor y la importancia del testimonio.
EVANGELIO: Mt 5, 13-16
Monición: 
La vocación del cristiano es ilustrada por Cristo en este texto evangélico. El horizonte es ampliado al máximo: “Tierra” y “mundo”. En la semejanza de la sal y de la luz, manifiesta la necesidad de influir en la vida de los demás y de iluminar a todos hasta testimoniar con su obrar el camino de encontrarse con el Padre.
PRESENTACIÓN DE LOS CATEQUISTAS:
(Se van nombrando por sus nombres y apellidos y se colocan bajo el presbiterio, en lugar destacado)
PROFESIÓN DE FE:
Celebrante:
La Palabra de Dios nos ha recordado en qué consiste nuestra misión. Ahora vamos a confesar nuestra fe en Él y en su Iglesia que nos envía a difundir el mensaje del Reino y expresamos nuestra fe:
– ¿Creéis en Dios, Padre Todopoderoso, Creador del Cielo y de la tierra?
Todos: Sí, creo.
Celebrante: – ¿Creéis en Jesucristo, su Único Hijo, nuestro Señor, que nació de Santa María Virgen, murió, fue sepultado, resucitó de entre los muertos y está sentado a la derecha del Padre?
Todos: Sí, creo.
Celebrante: – ¿Creéis en el Espíritu Santo, en la Santa Iglesia Católica, en la comunión de los santos, en el perdón de los pecados, en la resurrección de la carne y en la vida eterna?
Todos: Sí, creo.
Celebrante:
– ¿Os comprometéis, contando con la ayuda del Espíritu Santo, a testificar con vuestra vida el mensaje de Jesucristo que predicáis de palabra?
Todos: Sí, me comprometo
Celebrante:
– ¿Os comprometéis a que la catequesis sea anuncio de la Buena Nueva de Jesucristo según es vivida y trasmitida por la Iglesia?
Todos: Sí, me comprometo
.Celebrante:
– ¿Estáis dispuestos a formaros cada día mejor para ser instrumentos fieles del Espíritu en la tarea de llevar la salvación a los hombres?
Todos: Si, estoy dispuesto
Celebrante:
– ¿Prometéis ser constantes en la tarea de catequistas y luchar contra todo desaliento y desánimo, para así servir como evangelizadores a esta comunidad cristiana?
Todos: Sí, lo prometo
Celebrante:
Todos somos testigos de las disposiciones de estos catequistas que se ofrecen a servir a la comunidad a través de la catequesis. Pero, aunque el Espíritu está pronto, la carne es débil. Oremos para que el Señor derrame su luz sobre ellos.
Si  todos están dispuestos a comprometerse con el Señor, YO, VUESTRO PASTOR, LOS ENVÍO, para que, como catequistas, conduzcan a los niños y adolescentes, por Jesucristo, en el Espíritu, al Padre. Para que conociendo la revelación de Jesucristo, profesen la fe verdadera dentro de la Iglesia y construyan el Reino de Dios en el mundo.
(Extiende las manos sobre la asamblea de catequistas, y prosigue)
¡Señor Dios, fuente de toda luz y origen de toda bondad, que nos enviaste a tu Hijo único, Palabra de vida, para que revelara a los hombres el misterio escondido en tu amor! Bendice a estos hermanos nuestros, elegidos para el servicio de la catequesis, y concédeles el que sepan anunciar a Jesucristo y su mensaje con toda fidelidad de los hermanos. Por Jesucristo nuestro Señor.
(Los catequistas van pasando y ponen la mano derecha sobre la Palabra de Dios que el Celebrante les muestra, mientras les va diciendo:)
RECIBID LA PALABRA DE DIOS. VOSOTROS QUE LA HABÉIS MEDITADO, LLEVADLA EN VUESTRAS MANOS, EN VUESTROS LABIOS Y EN VUESTRO CORAZÓN. QUE AQUELLOS A QUIENES SOIS ENVIADOS PUEDAN, AL CONTEMPLAR VUESTRA VIDA, LEER EN ELLA LA PALABRA DE DIOS.
Oración de los fieles:
  1. Por el Papa Francisco para que el Señor le siga dando la sabiduría y el Amor para conducir a la Iglesia. OREMOS
  2. Por toda la Iglesia, para que fiel a su mandato misionero se preocupe por formar catequistas para la extensión del Reino. OREMOS
  3. Por todos los que nos hemos comprometido en el Ministerio de la catequesis para que seamos fieles a la Misión del Señor. OREMOS
Presentación de las ofrendas:
Se pueden ofrecer:
LUZ (signo de ser testigos de la Palabra que se anuncia)
SAL (signo de contagiar el entusiasmo, la alegría, la esperanza, dar “gusto”)
ESPIGA, RACIMO DE UVAS: (unidad, comunidad)
LEVADURA (fermento en la masa)
SEMILLAS (sembradores de la Palabra de Dios)
AGUA (evocación del Bautismo)
ACEITE (evocación de la Confirmación)
BARRO (pobreza, fragilidad dispuesta para ser modelada)
PAN Y VINO (solidaridad, trabajo, unión con Cristo, vida entregada…)
DESPEDIDA Y BENDICIÓN SOLEMNE:
SUGERENCIAS DE CANTOS:
CANCIÓN DEL ENVÍO:
 “Id y enseñad” (“Sois la semilla…”: Gabaráin); “Canción del Testigo” (Espinosa).
OFERTORIO: 
(Espinosa); “Este pan y vino” (Erdorzain). “Te presentamos el vino y el pan” (Espiosa); “Te ofrecemos, Señor”.
COMUNIÓN: 
“Te conocimos, Señor, al partir el pan” (Madurga); “Quédate con nosotros” (Teulé); “Arriésgate” (Erdozaín); “¿Le conocéis?” (Olivar-Manzano); “Cerca está el Señor” (Erdozaín).
DESPEDIDA: 
“Demos gracias” (Pentecostales”; Gracias, Señor” (Gabaráin);”Himno de la alegría” (M. Ríos- Beethoven).
CANTO A MARÍA:
“Madre de nuestra alegría” “Madre de los jóvenes” (Gabaráin).
Envío de los catequistas. (2ª opción)
Monición de entrada.
Coordinador: Hoy estamos reunidos en esta celebración Eucarística como representantes de la Catequesis Parroquial. Queremos hacer libre y generosamente la renovación y el envío a nuestra misión como catequistas, cumpliendo con el mandato de Cristo: “id por todo el mundo y anunciad a toda creatura el Evangelio…” Les invito, como responsable de esta tarea catequética, a que cada uno nos preparemos a vivir esta celebración para que el compromiso que profesemos, lo cumplamos con responsabilidad y fidelidad, unidos siempre a Jesús, nuestro Maestro, Guía y Pastor, a la Iglesia y a todos nuestros demás compañeros catequistas. Pidamos al Espíritu de Jesús, la luz, la sabiduría y la fortaleza para que lo que suscite en cada uno de nosotros, podamos llevarlo a término hasta el fin.
(Invitación del Sacerdote a preparase con dignidad a la celebración.)
RITO DE RENOVACIÓN Y ENVÍO DE LOS CATEQUISTAS
Celebrante:
Hermanos y hermanas catequistas, hoy estáis aquí en la presencia de Dios en esta celebración y en medio de esta asamblea, porque queréis renovar vuestro compromiso de continuar la noble y sacrificada tarea de seguir sirviendo a Dios y a la Iglesia como catequistas y también para enviar a este nuevo grupo de catequistas que Dios ha llamado a trabajar en su viña y que ellos han respondido con generosidad y alegría. La Iglesia les envía a realizar el mandato, que ha recibido del mismo Señor, Jesús: “id por todo el mundo y anunciad la Buena Nueva”. Por eso, antes de ir a cumplir esta misión, queremos saber su disposición y libertad para hacerlo. Por lo tanto, les pregunto:
Celebrante: ¿Queréis comprometerse a ser catequistas en la (esta) comunidad a la que pertenecen?
Todos: Sí quiero
Celebrante: ¿Estáis dispuestos a crecer y profundizar en su formación humana, cristiana, catequética y espiritual para que podáis transmitir mejor cada día el mensaje de salvación a los catequizandos que se les encomienden?
Todos: Si, estoy dispuesto.
Celebrante: ¿Estáis dispuestos a proclamar el mensaje de Jesús tal y como la Iglesia lo transmite y aceptar las mismas normas que ella nos da?
Todos: Sí, estoy dispuesto.
Celebrante: ¿Se comprometéis a trabajar unidos con nuestro Obispo, sacerdotes, coordinadores y con el Plan Pastoral de la Diócesis, siendo signo de unión y fraternidad entre todos?
Todos: Sí, me comprometo.
Celebrante: Ya que estáis dispuestos a cumplir con las exigencias del trabajo evangelizador, aceptáis y renováis vuestro compromiso como catequistas.
(Todos los catequistas leen en voz alta)
YO…, MOVIDO POR DIVINA INSPIRACIÓN, QUIERO COLABORAR CON JESÚS EN LA CONSTRUCCIÓN DEL REINO DE DIOS, LLEVANDO EL MENSAJE DE SALVACIÓN A LOS CATEQUIZANDOS QUE SE ME ENCOMIENDEN. POR ESO, EN ESTOS MOMENTOS, ANTE LA MIRADA AMOROSA DEL PADRE DIOS, DE SU HIJO JESUCRISTO, DEL ESPÍRITU SANTO Y DE ESTA COMUNIDAD ECLESIAL, QUIERO COMPROMETERME A SER CATEQUISTA.
ASUMO CON ALEGRÍA ESTA RESPONSABILIDAD SIENDO CONSCIENTE DE QUE ESTA TAREA ME TRAERÁ GOZOS, SACRIFICIOS Y SUFRIMIENTOS. PERO SÉ TAMBIÉN QUE CONTARÉ SIEMPRE CON LA AYUDA DE DIOS.
QUE LA INTERCESIÓN DE LA VIRGEN MARÍAME AYUDE A LLEVAR A BUEN TÉRMINO ESTA MISIÓN QUE JESÚS Y LA IGLESIA ME CONFIAN.
AMEN
Celebrante: Que el Señor selle con su bendición este compromiso que ante su altar habéis profesado. Dios que comenzó en vosotros esta obra buena, El mismo la lleve a su feliz término.
En el nombre del Señor y en el nombre de la Iglesia, yo les envío a ser testigos fieles de Jesús en vuestra tarea como catequistas.
Amén
Todos: Demos gracias a Dios.
(Todos los damos un fuerte aplauso)
ENTREGA DE LA CRUZ
Coordinador: En seguida el Padre… pronunciará la fórmula de entrega de la Cruz para las nuevas catequistas y al final sólo ellos responderán: Gracias, Señor, por la misión que me confías.
Celebrante: Hermanos catequistas, recibid esta Cruz, signo del amor de Cristo y de la misión que hoy reciben.
Todos los nuevos catequistas: Gracias, Señor, por la misión que me confías.
(En seguida el celebrante y el Coordinador les imponen la Cruz)
PRESENTACIÓN DE LOS SÍMBOLOS
Coordinador: En seguida vamos a presentar los signos que simbolizan nuestro ser y quehacer de catequistas.
Coordinador: Presentamos la PALABRA DE DIOS que va a ser guía, luz, camino, fuerza y alimento de nosotros los catequista.
Todos: abre, Señor, nuestro entendimiento y dispón nuestro corazón para que comprendamos, acojamos y vivamos tu Palabra.
Coordinador: Presentamos esta VELA ENCENDIDA porque Jesús nos manda ser luz por el testimonio de vida cristiana, de caridad y unidad, sólo así se nos reconocerá como discípulos de Cristo.
Todos: alumbren así nuestras obras en medio de la comunidad.
Coordinador: Presentamos la SAL, ella condimenta, y da sabor. Nosotros catequistas debemos dar este sabor a la catequesis.
Todos: Somos la sal de la tierra. Nos toca dar sabor de Evangelio, a la vida, a la catequesis y a toda circunstancia donde nos encontremos.
Coordinador: Presentamos estas SEMILLAS, las semillas representan a la Palabra de Dios que debemos proclamar a todos nuestros hermanos.
Todos: Aquí estamos, Señor. Cuenta con nosotros para construir tu Reino y danos la gracia de sembrar la semilla de tu Palabra en los catequizandos, tus hijos, y nuestros hermanos.
RENOVACIÓN DE LA PROMESAS BAUTISMALES
Celebrante: ¿Creéis en Dios Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra?
Todos: Sí, Creo
Celebrante: ¿Creéis en Jesucristo, el Hijo único de Dios, nació de la Virgen María, padeció, murió y Resucitó y está sentado a la derecha del Padre?
Todos: Sí, Creo
Celebrante: ¿Creéis en el Espíritu Santo, Santificador de nuestras vidas?
Todos: Sí, Creo
Celebrante: ¿Creéis en la Iglesia Católica, en la comunión los santos, en el perdón de los pecados, en la resurrección de los muertos y en la vida eterna?
Todos: Sí, Creo
Todos: Esta es nuestra fe. Esta es la fe de la Iglesia, que gloriamos de profesar en Jesucristo nuestro Señor.
Amén.
Se prosigue con la presentación de los dones

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