16 diciembre 2015

Oración Tercera Semana de Adviento

adviento
Motivación
En un árbol, los brotes son signo de la primavera y del fruto que va a dar; el labrador, cuando ve los brotes se ALEGRA pensando en la nueva cosecha que va a tener.
Estamos ya tan cerca de la Navidad -están tan claros sus brotes- que los cristianos debemos vivir llenos de ALEGRÍA, de ESPERANZA, de CONFIANZA… en la venida del Señor.
Esa venida, ¿la estamos preparando en este tiempo de ADVIENTO, o por el contrario estamos cruzados de brazos? ¿Nos estamos dejando empapar por las gotas de lluvia de Dios? ¿Empieza a notarse en nosotros que, con la lluvia -la Palabra- que ha caído sobre nosotros, nos preparamos a dar buenos frutos misericordiosos?
Los brotes del Evangelio de Adviento son:
compartir y repartir.
no engañar a nadie.
ser sencillos y vivir en esperanza.
orar, deseando la llegada del Señor.
Y sobre todo, la ALEGRÍA, porque sabemos que el Señor está cerca.
Y todo esto es posible, gracias a las gotas de la lluvia de Dios: son un regalo de Dios a la humanidad, por su gran misericordia.

La Palabra de Dios
El Señor se alegrará en ti. Sofonías 3,14-18a
El Señor está cerca. Filipenses 4,4-7

¿Qué hemos de hacer? Lucas 3,10-18
Ambientación y gestos
+ La corona de Adviento. Un niño llevará un cirio encendido con el que prenderá el tercero de los cuatro cirios de la “corona” exclamando con voz clara: ¡EMPECEMOS A BROTAR! Con la fuerza de la lluvia, demos frutos de buenas obras.
+ En las ofrendas, se puede presentar una planta o fruto con brotes, signo de la necesidad de dar fruto. Se puede también realizar el signo de regar una planta.
+ Colocar el dibujo de esta semana (ver al final del artículo) y siluetas de “gotas” con los compromisos de esta semana (viviendo alguna de las obras de misericordia).
Oración
¿Cómo alabarte, Señor,
si no sabemos qué hay que hacer?
¿Cómo hacer brotar en nosotros lo que quieres,
si no nos das la fuerza?
¿Cómo vivir alegres y contentos,
si Tú no nos ayudas? Esperaremos, Señor,
que el cielo envíe tu lluvia; la lluvia de tu amor,
la lluvia de tu misericordia.
Con ella creceremos y daremos fruto;
las personas te alabarán, te darán gracias,
y sabrán que Tú, el Dios del amor misericordioso,
nos das como lluvia tu fuerza,

para que demos frutos de buenas obras.
¡Gracias, Señor¡
adviento

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Deja tu comentario