CUANDO MI BARCO
Cuando mi barco esté varado
y no le sea posible avanzar.
Cuando las olas amenacen
con furia hacerlo zozobrar,
vuelve a mi tus piadosos ojos
tiéndeme tu mano amiga, Señor.
Quiero navegar con fe y esperanza,
sin temores que quitan la calma
a mi afligido corazón,
que sin tu ayuda pierde la razón
y en marcha sin rumbo
vaga en medio de lágrimas
por este pobre mundo.
Cuando mi barco parezca cargado
de desilusiones, de fracasos
hazme ver lo bueno que llevo
porque tu gracia me lo ha dado
y aunque la desazón me domine
vuelva a mi alma la alegría
porque tengo tu dulce compañía.
2- 7- 2012
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Deja tu comentario