Cada tiempo el ciclo litúrgico de la Iglesia tiene una peculiaridad. Así, el Adviento se convierte para los cristianos en un tiempo de esperanza fundamentada en la palabra que Dios ofrece a su Iglesia, la de ‘Él-con-nosotros’. El Adviento es preparación, es el tiempo del cumplimiento de esta promesa. “Vive con esperanza, y sueña con el rostro de un niño que une el cielo y la tierra”, escribe el P. Germán Padín en la presentación de los materiales para este tiempo que como siempre nos ofrece el área de Solidaridad y Misión de esta provincia.
“Descubre lo pequeño […] y limpia, no solo las figuras del Belén, sino más bien el pesebre de tu corazón”, incide el misionero. Por nuestra parte, os animamos a usar este material -la maquetación a cargo de Miguel Ángel Gil se ofrece en dos versiones diferenciadas, una adaptada para ordenador y la otra, para el móvil- que nos ayudará a vivir desde ya en actitud de vigilancia y espera, abriéndonos a la llamada al compromiso que nos hace Dios mismo, naciendo como uno de nosotros. “Lo necesitamos”, señala Padín “¡Qué déficit de esperanza el nuestro! Viene el Señor, porque nos ve vacíos”.
“¡Bienvenido sea el adviento!”. “¡Qué ganas tenemos de un Niño que nos reúna en torno a la mesa y nos haga vislumbrar que el mundo aún tiene solución!”, exclama el misionero. “Adviento es el Señor que llega”.
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