Para Ti, Señor,
los primeros serán los últimos.
Nosotros nos afanamos
en tener poder,
en brillar, en triunfar,
en ganar y en llegar.
Competimos en todo,
desde que somos niños,
y Tú, nos invitas,
a que nos relacionemos en igualdad.
Dices que sirva a todos
quien quiera ser el primero.
Nosotros, en cambio, queremos
ser servidos ¡y bien!
Somos exigentes con las personas,
intentamos que nos hagan lo más posible,
y Tú te echas al suelo
y lavas los pies a tus amigos.
Vivimos en una sociedad jerarquizada:
el que más tiene, el que más sabe,
el que más gana,
el que más puede, el que más hace,
el que más crea…
Pero Tú vienes a cambiar
el orden de las cosas.
Nos dices que las prostitutas
nos precederán en tu Reino.
Urge que cambiemos de código,
de baremo, de estilo.
Tenemos que vivir a tu manera:
comenzar a bajar,
en lugar de trepar
y construir contigo
la gran fraternidad,
que es lo único que nos puede salvar.
Mari Patxi Ayerra
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Deja tu comentario