MONICIÓN DE ENTRADA
Bienvenidos todos a la fiesta de la comunidad. Ahora que todos hemos vuelto a la rutina de cada día es tiempo de intensificar nuestra vida cristiana. Es tiempo de gracia. Es tiempo de renacer. La iglesia nos invita a dar gracias a Dios, a pedirle fuerza y luz para nuestras vidas heridas por el pecado.
Recibimos al sacerdote con el canto de entrada.
PRIMERA LECTURA
"Dios ruge como un león", dice el profeta Amós. En esta lectura descubrimos y oímos a un Dios enojado por las injusticias de los hombres poderosos.
Es un grito, una denuncia, una queja de ayer pero que llega hasta nuestros días.
Escuchemos la proclamación de la palabra de Dios.
SEGUNDA LECTURA
Pablo nos exhorta a orar por todos los hombres.
El mundo entero necesita ser sanado de las injusticias, de la explotación de los humildes, de la guerra y del abuso del poder.
Y nosotros también necesitamos ser sanados para llevar una vida en paz con todos.
Escuchemos la proclamación de la palabra de Dios.
EVANGELIO
La vida es tiempo de decisión. Elegir nuestros valores, nuestro camino, nuestras amistades, nuestras metas. El evangelio es también decisión. No olvidemos que Dios ha decidido elegirte a ti. Elige, hoy, vivir con Dios o vivir para lo que pasa.
Escuchemos la proclamación del evangelio.
ORACIÓN DE LOS FIELES
Oremos por el Papa, que su voz nos traiga la buena noticia del amor de Dios
Oremos por los obispos y sacerdotes para que nos animen en nuestro camino cristiano.
Oremos por los jefes de estado para que ejerzan su autoridad pensando en todos y especialmente en los mas débiles y desprotegidos de la sociedad.
Oremos por los pobres, los enfermos, los encarcelados, los que viven en medio de la guerra, los que no tienen trabajo para que el Señor y nuestra ayuda les llegue y consuele.
Oremos por todas las comunidades cristianas y especialmente por la nuestra para que crezcamos en amor, justicia y compromiso.
Oremos por los niños que van a empezar la catequesis para que aprendan a conocer, amar y vivir para el Señor; te pedimos también por los catequistas para que con ánimo y amor anuncien a Jesús.
Oremos por nuestros familiares difuntos y (nombres…) para que perdonados y sanados compartan con Cristo el banquete eterno.
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