Domingo de Ramos: Catequesis con niños

 

Lecturas:
Isaías 50, 4-7;
Salmo 21, 8-9. 17-24;
Filipenses 2, 6-11;
Lucas 22, 14-23,56
Jesús entra en Jerusalén–Lucas 19, 28-40

Procesión de Ramos

Después de decir esto, Jesús siguió su viaje a Jerusalén. Cuando ya había llegado cerca de Betfage y Betania, junto al monte que se llama de los Olivos, envió a dos de sus discípulos, diciéndoles: Vayan a la aldea que esta enfrente, y al llegar encontraron un burro atado, que nadie ha montado todavía. Desátenlo y tráiganlo si alguien les pregunta porque lo desatan, díganle que el Señor lo necesita. Los discípulos fueron y lo encontraron todo como Jesús se lo había dicho. Mientras estaban desatando al burro, los dueños le preguntaron:¿Por qué lo desatan? Ellos contestaron: Porque el Señor lo necesita. Y poniendo sus ropas sobre el burro, se lo llevaron a Jesús y le hicieron montar. Conforme Jesús avanzaba, la gente tendía sus propias ropas por el camino. Y al acercarse a la bajada del monte de los Olivos, todos sus seguidores comenzaron a gritar de alegría y a alabar a Dios por todos los milagros que habían visto. Decían: ¡Bendito el Rey que viene en el nombre del Señor! ¡Paz en el cielo y gloria en las alturas! Entonces algunos fariseos que había entre la gente le dijeron: Maestro, reprende a tus seguidores. Pero Jesús les contesto: Les digo que si estos se callan, las piedras gritaran. (Lucas 19, 28-40)

Reflexión

Hoy leemos la Pasión de Jesús, que resume nuestra fe. ¿Con que personajes nos identificamos? Jesús no busco la muerte, pero tampoco cedió en su misión de proclamar el Reino de Dios de amor, justicia y perdón. Su vida consistió en amar costase lo que costase. Los mismos que aclamaron a Jesús el domingo querían matarlo el viernes. ¿Por qué opiniones nos dejamos arrastrar nosotros? Jesús sabía que, al entrar en Jerusalén iban a querer matarlo. El estaba decidido a cumplir su misión, púes sabia que Dios Padre siempre estaría con El. Cuándo estas decidido a hacer algo bueno, ¿cómo te enfrentas a las dificultades? ¿Te das por vencido fácilmente? Compartir

Actividad

Dramatizar la escena de la entrada de Jesús en Jerusalén. Llevar palmas, disfrazar a un niño de Jesús.

Hacer un desfile donde Jesús pase al medio y todos cantan y agitan sus palmas. Luego cada uno escribe en un papel un deseo de cómo acompañara a Jesús esta semana y lo deposita en el altar.

Oración

Señor, danos fuerza para, como tú seguir adelante a pesar de las dificultades. Gracias por ayudarnos a llevar nuestra cruz. Danos fuerza para acompañarte con la tuya. Amen.