Moniciones, peticiones y cantos domingo 29 de septiembre

 

Tiempo Ordinario. Domingo 26

 

SALUDO

Dios nuestro Padre, que nos llama a la vida y nos lleva de la mano para que crezcamos en la entrega, en la esperanza y en el amor, esté con todos nosotros.

 

ENTRADA

Reunidos en la misma fe, comenzamos nuestra Eucaristía, la fuerza que necesitamos para vivir como testigos de Jesús, como verdaderos cristianos. Y hemos de hacerlo con alegría, con la ilusión necesaria para afrontar los problemas y las dificultades del día a día; no nos faltan motivos para ello, aunque también estamos sobrados de motivos para la desconfianza y el pesar. Los cristianos, la Iglesia, muchas veces no damos verdadero testimo­nio del amor de Dios a los hombres. Por eso, para vivir con la alegría y la gracia que Dios nos reparte, tenemos que esforzarnos en hacer nuestro el programa de Jesús, su mismo estilo de vida, una vida basada en las Biena­venturanzas, que siguen siendo una invitación permanente. Que la Eucaris­tía nos ayude a vivir siguiendo a Jesús. Bienvenidos todos.

 

ACTO PENITENCIAL

Aunque andemos lejos de Dios, Él siempre nos llama y nos da su per­dón; con esta confianza reconocemos nuestros pecados:

- Tú, que nos das la fuerza de tu Espíritu para vivir unidos a ti y a las personas.

SEÑOR, TEN PIEDAD.

- Tú, que nos llamas a la vida plena, a la fraternidad, a la verdad y la salvación.

CRISTO, TEN PIEDAD.

-Tú, que nos invitas a descubrirte presente, cercano y solidario en medio de la vida.

-SEÑOR, TEN PIEDAD.

Oración: Señor, perdona nuestras ofensas como lo esperamos de Ti, y como nosotros perdonamos a los que nos ofenden. Por Jesucristo nuestro Señor.

 

ORACIÓN COLECTA

Dios del amor y de la sabiduría, que nos has creado para que hagamos del mundo un lugar donde reine la verdad; al comenzar esta celebración te rogamos que nos ayudes a mirar con ojos de fe todo lo que nos rodea, de modo que podamos descubrirte presente en la vida de las personas. Por nuestro Señor Jesucristo.

 

LECTURA NARRATIVA

El peregrinar del pueblo de Israel hacia la tierra prometida es un lar­go camino; en su organización social y religiosa ocupan un lugar desta­cado los ancianos, que recogen la experiencia y la sabiduría de la vida; en ellos está presente el espíritu de Dios que les hace profetizar y analizar la realidad, siempre tratando de descubrir al Dios de la libertad.

 

LECTURA APOSTÓLICA

La carta de Santiago es una llamada de atención para cuantos pensa­mos que la vida es sólo tener y acaparar; la riqueza injusta es atacada con fuerza en este texto; una llamada de atención, sobre todo si nuestro bie­nestar nace de la injusticia, del fraude o de la propia seguridad, sin aten­der a las necesidades de quienes nos rodean.

 

 

LECTURA EVANGÉLICA

Siempre nos creemos mejores y superiores a los demás, siempre cree­mos tener motivos para enjuiciar a los demás y para justificarnos a noso­tros mismos; creemos que somos los únicos con motivos para poder decir las cosas, o para trabajar por los demás; sin embargo hay muchos grupos y personas que también buscan el bien, y a todos hemos de apoyar, sea cual sea su ideología.

 

ORACIÓN DE LOS FIELES

 Oremos al Dios de la vida, en quien nuestra alma descansa verdaderamente. Él escucha todo lo que le pedimos y es firme lo que

dispone por nosotros, sus hijos amados. Oré- mosle diciendo: ESCÚCHANOS, PADRE.

1. Por la Iglesia, que se siente íntima y realmente solidaria con la humanidad y su historia. OREMOS:

2. Por todos los que tienen que huir de su tierra y por todos los cristianos perseguidos. OREMOS:

3. Por todos los enfermos y sus familiares OREMOS:

4. Por todas nuestras necesidades y preocupaciones. OREMOS:

5. Por... OREMOS:

Escucha, Padre, estas súplicas porque quieres que todos los hombres se salven y nunca se alejen de Ti. Por Jesucristo, nuestro Señor.

 

 

ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

Te  ofrecemos, Señor, este pan y este vino para darte gracias, con ellos, por todos los beneficios que recibimos de ti, y te rogamos que todo lo bueno que haces por nosotros nos sirva para alabar tu nom­bre y trabajar por el bien de los hermanos. Por Jesucristo.

 

PREFACIO

Realmente es justo y necesario darte gracias, Señor, por ser el Dios Palabra encarnada, Palabra de Vida que siempre se cumple, haciéndonos crecer como personas, como hermanos.

Tú nos enseñas, Señor, a confiar en todo momento en tu proyecto de salvación, el de Jesús, donde hay sitio para todas las personas, donde no se piden informes ni certificaciones; un proyecto que se va haciendo en silencio, día a día, donde las personas se respetan y se quieren.

Por eso ahora queremos unirnos a cuantos hombres y mujeres, de hoy y de siempre, han tratado de vivir con fidelidad, para glorificarte dicien­do: Sanlo, Santo, Santo...

 

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

Llegue a Ti, Señor, nuestra gratitud por la Eucaristía que hemos celebrado y compartido; haz que sepamos descubrirte en la vida y en el deseo de las personas por hacer presente en el mundo tu Reino de paz, de justicia y de fraternidad. Por Jesucristo.

 

CANTOS PARA LA CELEBRACION

Entrada:  Jesucristo nos amó (Apéndice) En medio de nosotros CLN A6

 El Señor es mi fuerza. CLN 717

Introito en latin: Omnia quae fecisti

Salmo Responsorial y Aleluya. Los mandatos del Señor .. (Propio)  

Ofertorio: Bendito  seas Señor CLN H 6

Santo   Gregoriano.

Comunión: Cuando el pobre nada tiene CLN 725;  Comiendo del mismo pan CLN 027;

 Yo soy el pan de vida CLN 038; Si me falta el amor CLN 741       

Final: Demos gracias al Señor (Cantos varios)