02 julio 2024

Tiempo Ordinario. Domingo XIV

 

Tiempo Ordinario. Domingo XIV

 

SALUDO

Dios nuestro Padre, que nos da la fuerza de su Espíritu para poder confesar a Jesús como Señor de nuestra vida, nos acompañe y esté con todos nosotros.

 

ENTRADA

Comenzamos esta Eucaristía, hermanos, sabiendo que estamos en la presencia de Dios Padre. Una y otra vez nos sentimos necesitados de este espacio de celebración, de oración y de fiesta, en la certeza de que Jesús no viene a este mundo para amargamos la vida, sino para que todos tcn­gamos una vida en plenitud. Para que así sea Jesús nos invita a vivir de acuerdo con su mensaje, y nos dice que no nos equivocamos si, con el tra­bajo de cada día, contribuimos a extender su Reino y a construir caminos donde crezcan la fraternidad, la convivencia y la paz.

Cada vez que nos reunimos y celebramos la Eucaristía nos llenamos de la fuerza y del ánimo de Dios para seguír en la tarea de la que Él mis­mo nos hace partícipes. Comenzamos, pues, llenos de alegria.

 

ACTO PENITENCIAL

Sabemos que la paz de Dios siempre se nos regala, pero nuestra vida se suele apartar de esta grandeza; pidamos al Señor que nos muestre su misericordia y nos conceda su perdón:

- Tú, que habitas en medio de las personas queriéndonos incluso cuan­do vivimos lejos de Ti.

SEÑOR, TEN PIEDAD.

-- Tú, que vienes a compartir nuestra vida humana, mostrándonos la grandeza de todas las personas.

CRISTO, TEN PIEDAD.

- Tú, fuerza que anima y acompaña toda búsqueda de paz, de justicia y de fraternidad. SEÑOR, TEN PIEDAD.

Oración: Danos, Señor, tu perdón y tu misericordia, para que vivamos en tu paz. Por Jesucristo.

 

ORACIÓN COLECTA

Dios Padre nuestro, que nos has enviado a tu Hijo Jesús y que, en su Reino, nos haces a todos partícipes de tu amor; ayuda a esta comu­nidad cristiana a vivir entregados a los hermanos más necesitados y a trabajar para que todos puedan descubrirte como el Dios de la bon­dad v de la misericordia. Por nuestro Señor Jesucristo.

 

LECTURA PROFÉTICA

Con ta fuerza de Dios, el profeta recibe una misión que le desborda; su predicación deberá dirigirse a un pueblo rebelde que vive agarrado a sus falsas seguridades; cl rechazo hacia quien les cuestiona su vida no se hará esperar. De nuevo vemos cómo la fuerza de Dios se manifiesta a tra­vés de la debilidad humana.

 

LECTURA APOSTÓLICA

Pablo trata de exponer los motivos que le llevan a dar testimonio de Jesús, pese a su pequeñez y debilidad, ante una tarea ardua y dificil; Pablo sabe que llevar adelante ese trabajo no será sólo gracias a sus fuerzas, bien escasas, sino a la grandeza de quien le envía. Todo resultado, todo logro, necesita de la fuerza y dedicación humanas, pero es, sobre todo, don de Dios.

 

LECTURA EVANGÉLICA

Los paisanos de Jesús dudan de él, ¿de dónde le viene todo eso, no es el hijo del carpintero? Jesús se duele por la falta de fe de quienes, al cono­cerle, "deberían" estar más cercanos; aquellos conocidos de Jesús son incapaces de reconocerle como quien de verdad es, y le buscan sólo por interés, esperando lo espectacular.

 

ORACIÓN DE LOS FIELES

   Oremos a Jesús, verdadera sabiduría y verdadero esclarecimiento del misterio del ser humano. Oremos diciendo: ESCÚCHANOS, SEÑOR.

 1. Por la Iglesia. Que nuestra fe aumente día tras día con la certeza de la resurrección del Señor. OREMOS:

2. Por los gobernantes, por su conversión y la nuestra. Que todos reconozcamos quiénes el verdadero camino, verdad y vida. OREMOS:

3. Por todas nuestras necesidades, inquietudes, deseos y dolores. Que el Señor las escuche y nos demos cuenta de que solo Él nos ofrece una respuesta plena. OREMOS: 4. Por los conductores, especialmente en estos días de vacaciones. OREMOS:

5. Por... OREMOS:

6. Por todos nosotros, reunidos hoy domingo en la iglesia. Que vivamos siempre a la luz de la Palabra hecha hombre. OREMOS:

Escucha, Jesús, la oración de tu pueblo, y vierte en nuestros corazones tu gracia. Por Jesucristo, nuestro Señor.

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ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

El pan y el vino que te presentamos, Señor, transformado por tu Espíritu en el Cuerpo y la Sangre de Jesús robustezcan nuestra fe, fortalezcan nuestra esperanza ,y engrandezcan nuestro amor. Por Jesucristo.

 

PREFACIO

En verdad es necesario para nuestra vida, Señor, reconocerte como el artífice de todo lo creado, que nunca cesas de mostrarnos el camino que tenemos que seguir si queremos crecer en hermandad. En medio del pue­blo sigues suscitando profetas que, sin miedo a dejar de lado lo más cómodo, optan por el anuncio de la verdad y por el testimonio de una vida donde Dios y los hombres son lo más importante.

Pcrmitenos vivir unidos a estos hombres y mujeres de fe recia que sin cesar glorifican tu nombre con su trabajo de cada día. Con ellos te deci­mos: Santo, Santo, Santo...

 

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

Te damos gracias, Señor, por esta Eucaristía en que hemos parti­cipado, y te rogamos que nos ayudes a llevar al trabajo de cada día todo lo que aprendemos de Ti, para que así sepamos transmitir tu presencia amorosa en la vida de las personas. Por Jesucristo.

 

DESPEDIDA

La Eucaristía nos ha convocado. Ahora, cuando termina, es la hora del compromiso. Hay que ser profetas en nuestra tierra. Profetas que denuncien y anuncien. Hombres y mujeres que no se amilanan ante nada, porque tiene un mensaje que anunciar y una obra a realizar: la fraternidad entre todos los hombres.

 

CANTOS PARA LA CELEBRACION

Entrada: Sálvanos, Señor Jesús. Apéndice.(Apéndice)   El Señor es mi fuerza. CLN 717   Señor  tú eres mi refugio CN 701; Vienen con alegría CLN 228

 Introito en latin: Suscepimus Deus  (Canto gregoriano)

Misa: En los meses de Julio y Agosto, en zonas con turistas extranjeros puede cantarse la Misa de Angelis

Salmo y Aleluya: Misericordia, Señor, misericordia. (Propio)

Ofertorio: Te presentamos CLN-H3  

Santo:  CLN-I 4.

Paz: Guarda mi alma en la paz  CLN-710

Comunión:  Acerquémonos todos al altar: CLN 024

 Comiendo del mismo pan CLN 027; Por valles y aldeas CLN 273 ;

   Una espiga  CLN 017

Final: Loado mi Señor. (Liturgia de las Horas) N 74

 

 

 

 

 

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