MONICIONES (Domingo 15 Tiempo Ordinario - A)
Inicial.
Un domingo más, el Señor nos convoca para encontrarnos con él en la Eucaristía.
Hoy, nos invita a escuchar su Palabra, pero más que con los oídos, con el corazón. Porque lo que nos va a pedir es que nuestro corazón sea tierra fértil donde pueda echar raíz y dar fruto abundante.
Iniciamos esta celebración pidiendo al Señor que arranque de nosotros todas esas malezas: egoísmo, falta de compromiso, comodidad, individualismo,… que impiden que su Palabra vaya cambiando nuestra vida y que los frutos que producimos sean buenos.
Primera Lectura.
El profeta compara los efectos de la lluvia y la nieve sobre la tierra, con la Palabra de Dios. Ambas no vuelven vacías, antes cumplen su misión.
Segunda Lectura.
San Pablo nos invita a los cristianos a esperar la redención trabajando en la transformación de este mundo, para lo que no nos falta la ayuda del Espíritu.
Evangelio.
Jesús nos va a explicar, como a los primeros seguidores, la hermosa parábola del sembrador. También espera de nosotros que seamos tierra buena que dé mucho fruto
Puestos de pie cantamos aleluya.
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