Material para el Animador de la Palabra.
Celebración de la Epifanía del Señor. Ciclo B. 6 de enero de 2024.
1. AMBIENTACIÓN
Podemos colocar un cartel con uno de estos textos: “Una estrella nos orienta” o “La estrella se llama Jesús”.
2. RITOS INICIALES
Monición de entrada. Hoy, Epifanía del Señor, conmemoramos, ante todo, la manifestación de Dios a todos los pueblos y, lo hace con el símbolo de la Luz: una Estrella que nos invita a ponernos en camino y nos hace de guía. El mensaje de este día es una invitación a dejarnos conducir por la Luz de Dios, siguiendo a Jesús como la gran Estrella de nuestra historia personal y comunitaria.
Canto
Saludo. Hermanos y hermanas, Jesús es una Estrella potente que brilla con luz suficiente para todos; nosotros queremos ser iluminados por Él, alábemele juntos.
Acto penitencial
Tú, que sales al encuentro de quien te busca: Señor, ten piedad.
Tú, estrella que nos conduce a la salvación: Señor, ten piedad
Tú, que nos orientas como nadie: Señor, ten piedad
Gloria
Oración. Dios, Padre bueno, te has manifestado ampliamente porque quieres que todas las personas se salven y lleguemos a conocer la Verdad, nosotros confesamos que Jesús, tu Hijo, es la luz y la salvación para todas las personas y todos los pueblos. Cuenta con nosotros para irradiar el Evangelio. Por J. N. S. Amen
3. LITURGIA DE LA PALABRA
Monición a las lecturas. Jesús es “patrimonio” de toda la humanidad. Nadie lo debe acaparar. Todos tienen derecho a encontrarse con Él, a enriquecerse con su presencia y su “Buena Noticia” por eso la distribución de la gracia de Dios ha de llegar a todos. Jesús aporta novedad, futuro; despierta tanto interés y admiración que muchos se ponen en camino intuyendo que el encuentro con Él será una liberación de todo lo negativo.
Lecturas. Isaías. 60, 1-6. Salmo o canto. Efesios. 3, 3a. 5-6. Aclamación. Mateo 2,1-12.
Comentario homilético. Dios se da a conocer, se manifiesta; despierta interés, admiración, ganas de encuentro. Muchas personas quieren conocerlo y se ponen en camino alentadas por esta inquietud. Intuyen que nadie como Dios pude colmar las aspiraciones humanas.
Y este es el mensaje principal de este día. Epifanía es ofrecimiento de Dios a todos los que desean sinceramente su encuentro; es provocación para la búsqueda de valores auténticos, dinamismo de la fe puesta en camino, comunidad creyente que sale de sí misma para darse a todos; para Él no hay distinciones, Jesús es un referente universal, el salvador de todos y para todos.
El Evangelio nos habla de personajes exóticos que intuyen que Dios se manifiesta por medio de signos y acontecimientos. Ha llegado hasta ellos la luz de una Estrella singular y se dejan conducir, se convierten en peregrinos del misterio, en buscadores de ideales. Emprenden esa aventura con espíritu joven, no importa la edad, porque en su corazón han escuchado una melodía de esperanza y se ponen en camino
Los creyentes tenemos, o deberíamos tener, experiencia de encuentro con Jesús, pero no por eso dejamos de buscar; al contrario, la fe nos enciende el corazón aún más y nos impulsa a nuevos compromisos; nos provoca para emprender nuevos caminos, dispuestos a hacernos regalo, canto de esperanza para provocar nuevos encuentros en la fraternidad.
Ciertamente, este relato evangélico, pintoresco y legendario, está cargado de enseñanza. Estos personajes son un símbolo elocuente de lo que atrae y apasiona la búsqueda del ideal. A lo largo de nuestra vida, antes o después, aparece alguna estrella capaz de iluminarnos, solo se nos pide intentar vivir con sinceridad y corazón generoso. Los sensibles a lo esencial reconocen la “Estrella de Dios” y la siguen...
Como escribe un autor de nuestros días, el relato de los Magos es un reflejo de lo que suele acontecer a todos los que emprenden el camino de la fe:
Ven la estrella.
Interpretan el signo.
Se ponen en camino.
Perseveran, a pesar de las dificultades.
Buscan apasionadamente el encuentro con el Señor.
Lo encuentran, lo reconocen y se dan como regalo.
Y, ya no vuelven al antiguo camino, ahora la ruta es NUEVA.
Credo
Oración de los fieles
Para que la Iglesia acerque la luz de Dios a todos los pueblos, Roguemos al Señor.
Para que los cristianos seamos misioneros atrevidos y entusiastas, Roguemos al Señor.
Por todos los que desean encontrarse con Dios, para que sepamos mostrarles el camino y caminar a su lado, Roguemos al Señor.
Por las personas que no reconocen en Jesús la gran luz que viene de Dios para salvarnos, Roguemos al Señor.
Para que los niños reciban ante todo el regalo de una buena educación, en la familia y en la sociedad, Roguemos al Señor.
Por nuestras intenciones y por las necesidades de nuestro pueblo, Roguemos al Señor.
4. RITO DE COMUNIÓN
Monición. Jesús se brinda de mil modos: como luz, verdad, camino, alimento...Para experimentar lo que vale, sólo hace falta deseo de encuentro y buena voluntad. Disfrutemos de la comunión con Jesús individual y comunitariamente.
Canto
Introducción al Padre nuestro
Te bendecimos, Padre, por Jesús de Nazaret,
tu gran Estrella y la Estrella de todos los tiempos.
Lo expresamos con júbilo y sano orgullo:
En ningún momento de la historia se le ha podido quitar la razón.
Jesús es la semilla vigorosa plantada en nuestra tierra
para dar vida a todas nuestras sementeras.
La luz que orienta nuestro caminar,
el sacramento de la dignidad humana.
Sí, Padre, nadie ha podido apagar la luz que Él nos regló con su venida
Él es el Maestro que merece ser escuchado
el redentor cargado de Vida regalada y ofrecida.
Nos unimos a su proyecto y a su oración y ...
rezamos todos juntos la oración que Él mismo nos enseñó... Padre nuestro...
Gesto de la paz
Distribución de la comunión: canto
Acción de gracias (se puede hacer espontáneo)
El hombre...
encontró al hombre
y le llamó hermano.
El hombre...
encontró al hermano
y le llamó Dios.
El hombre...
encontró a Dios
y le llamó AMOR
El hombre...
encontró el AMOR
...y es feliz.
(J. Del Olmo)
5. RITO DE CONCLUSIÓN
Compromiso. Hablar, con nuestra vida y nuestros hechos, de la Buena noticia
Oración después de la comunión (se toma del misal)
Bendición
Monición final. Jesús es el regalo de Dios, al que tiene derecho toda persona. Por eso, Epifanía es una convocación a ser misioneros, a evangelizar. Nadie ha traído una Luz tan potente como Jesús. Está puesta en lo más alto para que todos podamos ver.
Ahora salimos a la calle y a la vida diaria, Los trabajos, los colegios. Seamos regalo de vida para todos los que nos encontremos en el diario caminar. Jesús nos acompaña, ha venido para quedarse. Ánimo y, a Vivir en plenitud.
Canto final (Nos dependimos con el gesto de adorar al Niño)
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