Ante el Evangelio de hoy, reconocemos, Padre, tu sabiduría, y volvemos a ti nuestra mirada para que nos ayudes a caminar por tus caminos. Por eso te pedimos:
SEÑOR, QUE TU MIRADA NOS TRANSFORME
• Que la Iglesia, siguiendo el Evangelio de Jesús, pueda ser un día verdaderamente una “Iglesia pobre y de los pobres”. Oremos.
• Que nuestro mundo llegue a ser un día un mundo de justicia universal, donde el centro de todo sean las personas y no la idolatría del dinero. Oremos.
• Que quienes vivimos por encima de lo necesario cambiemos nuestro estilo y nuestro nivel de vida, mientras siga habiendo pobres y excluidos, para que todos puedan vivir dignamente. Oremos.
• Que, iluminados por la Palabra de Dios, los que nos llamamos cristianos seamos coherentes con el Evangelio en nuestro modo de pensar y de vivir y en el uso que hacemos de nuestros bienes.
• Que descubramos el sentido de la solidaridad y no nos conformemos con la limosna para tranquilizar nuestras conciencias. Oremos.
• Que sea el amor de Jesucristo y no sólo la ética o la buena voluntad el que rija el sentido de nuestra vida cristiana. Oremos.
Escucha, Padre, nuestra oración, y convierte nuestros corazones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Deja tu comentario